Metatarsalgia
¿Qué es el hiperapoyo metatarsal?
La metatarsalgia o hiperapoyo metatarsal es una afección dolorosa de la región del antepié situada entre el tarso y las falanges de los pies. El metatarso está constituido por los huesos metatarsianos y es uno de los puntos del pie sobre los que se apoya el peso del cuerpo al caminar o correr, coincidiendo con la flexión dorsal del mismo.
¿Cómo se produce la metatarsalgia?
La metatarsalgia es una de las dolencias más habituales en podología, especialmente en deportistas o personas que suelen correr con cierta frecuencia.
Puede ocurrir que no todos los metatarsianos se coloquen en el plano de apoyo con la misma inclinación y longitud. Un exceso o defecto en la inclinación o hundimiento del metatarsiano o en la longitud del mismo pueden ocasionar una alteración del arco transverso anterior y de la parábola metatarsal. Esto provocará hiperapoyos plantares y dolor en la marcha que impiden la deambulación normal.
El afectado puede empezar a sufrir dolor al realizar esfuerzos o ejercicio intenso, que inicialmente desaparece al entrar en reposo. Sin embargo, el dolor se va reproduciendo cada vez más tempranamente y con mayor intensidad, hasta el punto en el que el afectado puede sentir dolor al caminar o incluso sin tener que apoyar el pie.
Causas de la metatarsalgia
Entre sus causas se encuentran diversos factores:
1
Formas del pie. Las personas con un arco plantar alto a la hora de andar suelen ejercer más presión sobre el metatarso y hacer que este se inflame con facilidad. Esto también ocurre en personas con el segundo dedo más largo que el dedo gordo, por ejemplo.
2
Calzado inadecuado. Los zapatos de tacón alto hacen que recaiga peso adicional en la parte delantera del pie y, por tanto, son una de las causas principales de metatarsalgia en mujeres.
3
Neuroma de Morton. Se trata de una inflamación en el tejido que crece alrededor del nervio, normalmente entre el tercer y el cuarto dedo del pie.
4
Deformaciones en el pie. Igualmente, los dedos de martillo o los juanetes pueden provocar metatarsalgia.
5
Dolencias como artritis inflamatoria, artritis reumatoide o gota.
Síntomas comunes del hiperapoyo metatarsal
En nuestra clínica de Madrid, los pacientes suelen presentar los siguientes síntomas relacionados con metatarsalgia:
- Dolor fuerte y continuo en la planta del pie, justo debajo de los dedos.
- Dolor agudo y entumecimiento en los dedos del pie.
- Sensación de tener una piedra en el zapato de forma continuada.
- Dolor que empeora al ponerse de pie, correr, caminar, etc.
Tipos de metatarsalgia
Pruebas de diagnóstico para el hiperapoyo metatarsal
Para poder establecer un diagnóstico de metatarsalgia, además de revisar los síntomas y signos que presenta el paciente, las pruebas que realizamos en la Clínica Piqueras incluyen radiografías y pruebas de baropodómetro para comprobar las presiones plantares.
Además, si el doctor sospecha de la presencia de neuroma de Morton, prescribirá una ecografía o resonancia magnética para poder ver los tejidos blandos.
Tratamiento conservador y quirúrgico en Madrid
Para tratar esta afección, es posible utilizar dos tipos de tratamiento, incluyendo uno de ellos la cirugía de mínima invasión.
Tratamiento conservador sin cirugía
Su eficacia es notable, aunque condiciona el uso de diversos tipos de zapatos.
Tratamiento quirúrgico
Se realiza mediante una cirugía mínimamente invasiva, accediendo por una incisión de 2mm. Esto permite actuar sobre el metatarsiano realizando un corte selectivo en el hueso y en un plano determinado, que devuelve al hueso su posición funcional y permite que se equilibren las zonas de carga. La deambulación inmediata se convierte en un arma importante en la curación de estos procesos.
Tratamiento intradérmico en la clínica Piqueras
En ocasiones, la inclinación o excesiva longitud del metatarsiano es tan acusada que con el paso del tiempo ha producido en la piel una hiperqueratosis plantar intratable o IPK.
Se caracteriza por la formación de una callosidad que penetra en las capas profundas de la piel llegando a limitar la movilidad normal de la dermis, en este el paciente tiene la sensación de estar clavándose algo. La formación de este tejido fibrótico, provoca el fracaso de la cirugía metatarsal.
Para evitar esta circunstancia Clínica Piqueras desarrolló y publicó un complemento a la técnica de cirugía metatarsal para el tratamiento de estas IPK, que consiste en liberar por medio de cirugía mínimamente invasiva las adherencias a nivel dérmico en el mismo acto quirúrgico con un resultado exitoso.
El paciente regresa a su domicilio al finalizar la intervención y acudirá a revisiones semanales hasta el alta definitiva que normalmente oscila entre 4 y 6 semanas en función del paciente, el grado de deformidad y la evolución postquirúrgica.